La mayor innovación en la industria del plástico en todo el mundo es sin duda la invención del polímero de alta densidad conocido como polietileno (PEHD) en 1953 por parte del químico alemán Karl Ziegler y su equipo.
Karl Ziegler fue un químico alemán que lideró un equipo de investigación en la compañía alemana de la industria química, BASF. En 1953, Ziegler y su equipo desarrollaron un método para la producción de polietileno de alta densidad (HDPE), un tipo de plástico resistente y versátil que se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones, desde bolsas de plástico hasta botellas de leche.
El método de Ziegler, conocido como la técnica de polimerización por coordinación, implicaba el uso de un catalizador de titanio y un compuesto de alquilaluminio para producir HDPE a partir de etileno, un gas obtenido del petróleo. La técnica de Ziegler permitió la producción en masa de HDPE y revolucionó la industria del plástico al permitir la fabricación de productos más resistentes, ligeros y duraderos.
El descubrimiento de Ziegler y su equipo también tuvo un impacto significativo en la industria petrolera, ya que permitió el uso de etileno como un subproducto valioso del petróleo crudo. La técnica de polimerización por coordinación también sentó las bases para el desarrollo de otros tipos de plásticos de alta densidad, como el polipropileno, que se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones, desde envases de alimentos hasta automóviles y electrodomésticos.
Antes de la invención del PEHD, la mayoría de los plásticos disponibles eran de baja densidad y tenían propiedades limitadas en términos de resistencia y durabilidad. El PEHD, por otro lado, tenía una densidad mucho mayor y podía soportar condiciones más adversas, como altas temperaturas y exposición a productos químicos. Esta nueva forma de plástico no solo revolucionó la industria del embalaje, sino que también se utilizó en una amplia gama de aplicaciones, desde la fabricación de tuberías hasta el equipamiento deportivo.
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