Principalmente son las sustancia que se incorporan a los materiales plásticos y que les dan ciertas propiedades en cuanto a resistencia, adaptabilidad, estructura y características físicas.
Los plásticos comerciales contienen aditivos y son necesarios para obtener el material que pueda procesarse correctamente.
Aún así, no suelen ser suficientes cuando el producto requiere ciertas propiedades especiales, entonces el Masterbatch aditivo entra en juego para alterar las propiedades del material y otorgar a la pieza final en plástico las propiedades que el cliente desea.
Aditivos a la medida para cada exigencia
Se requiere conocer primero los requisitos del material final y su finalidad para poder saber su aplicación y así llevar una secuencia de producción apropiada para cada demanda.
Algunas solicitudes pueden ser:
- Fácil dispersión a través del plástico
- Cumplimiento de normativas sectoriales y seguridad
- Que no produzcan interacciones químicas no deseadas con otras sustancias de la propia resina de diseño
- Sin dificultad de procesamiento
- Mejorar las propiedades naturales
En algunos casos pueden llevar aditivos estabilizantes de rayos ultravioleta o anti-UV, que se utiliza para mejorar la durabilidad de una pieza expuesta a radiación ultravioleta, ya que por lo general, todos los plásticos se degradan por la exposición al sol.
Otra solicitud puede ser un aditivo antioxidante, que lubrica el polímero interrumpiendo las reacciones de degradación que puede recibir el material ante la exposición a temperaturas o la intemperie.
No dejamos de fuera los aditivos antimicrobianos para plásticos o antibacteriales, que pueden utilizarse para empaques o productos sanitarios. Estos evitan la propagación de virus, hongos o bacterias.
Hay otros aditivos como espumantes que se expanden, otros retardantes de llamas para productos en construcción, electrónica o mobiliario que retardan la propagación de la llama en el material.
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